
El Ministerio de Defensa de Rusia ha identificado el número del misil que derribó el vuelo MH17, de Malaysia Airlines, en el este de Ucrania en julio de 2014, según ha informado Nikolái Parshin, jefe de la Dirección General para los Misiles y Artillería del Ministerio.
El MH17 del 17/07/2014 -con código compartido con la aerolínea KLM Royal Dutch Airlines —KL4103/KLM4103— fue un vuelo internacional regular de pasajeros operado por un avión Boeing 777-200ER, que partió del aeropuerto de Ámsterdam-Schiphol (Holanda) a las 12:14 hora local hacia el aeropuerto Internacional de Kuala Lumpur (Malasia) con 283 pasajeros y 15 miembros de la tripulación. Pero el aeroplano cayó en la villa de Grábovo, en el óblast de Donetsk, a 40 kilómetros de la frontera con Rusia. El contacto se habría perdido a las 16:15 (hora local).
Funcionarios de inteligencia estadounidenses dijeron que un misil tierra-aire había sido el causante del accidente, sin identificar a los autores.
La aviación rusa informó que el avión fue abatido cuando volaba a 10.000 metros de altura.
Desde Kiev, culparon a un misil lanzado por supuestos milicianos prorrusos, mientras que éstos acusaron al ejército ucraniano porque aseguraron no poseer armas capaces de ese disparo.
El entonces presidente estadounidense, Barack Obama, aliado del gobierno ucraniano, dijo que había "clara evidencia de la responsabilidad de los rebeldes prorrusos".
Los militares rusos iniciaron una investigación que acaba de concluir.
Según ellos, el misil fue fabricado en la región de Moscú en 1986 y entregado a una unidad militar de Ucrania, después de lo cual nunca fue transportado de regreso a Rusia.
Moscú ya ha notificado sus conclusiones al Equipo de Investigación Conjunto (JIT, por sus siglas en inglés) en Holanda, y se invitó a los representantes del grupo que investiga el derribo del MH17 a estudiar los documentos sobre el misil proporcionados por el Ministerio de Defensa ruso, si así lo desearan.
El portavoz del Ministerio de Defensa ruso,Ígor Konashénkov, dijo que estos hallazgos "prueban claramente la inconsistencia de las acusaciones" que atribuyen la catástrofe a un sistema de misiles Buk perteneciente a Rusia.
Expertos del Ministerio aseguraron que los videos utilizados para acusar a Moscú del derribo del avión fueron falsificados, según han podido concluir tras analizar con detalle las imágenes del supuesto traslado del Buk ruso a Ucrania, precisó Konashénkov.
Nikolái Parshin, jefe de la Dirección General para Misiles y Artillería del Ministerio de Defensa de Rusia, presentó un análisis detallado de los videos, así como las pruebas de su falsificación, y ha presentado una grabación de audio que, según el organismo, prueba la implicación de Ucrania en el derribo del MH17.
En la grabación, obtenida en 2016 en la región de Odessa, se aprecia una comunicación entre militares ucranianos. Una de las voces pertenece al coronel de las fuerzas armadas de Ucrania, Ruslán Grinchak, encargado del control de la situación del aire en la zona de Donbass, donde tuvo lugar el derribo del avión.
Según el Ministerio, la voz en la grabación señala el riesgo de "derribar otro Boeing malayo", en referencia a la tragedia ocurrida con el MH17.
"El Ministerio de Defensa ruso ha proporcionado pruebas exhaustivas sobre el misil que derribó al MH17 y son suficientes", insistió el 1er. vicepresidente del Comité de Defensa y Seguridad del Consejo de la Federación de Rusia, Yevgueni Serébrennikov.
Él expresó que Rusia espera una investigación objetiva de esta tragedia a nivel internacional.
Otras tensiones
Las novedades han ocurrido en un complejo escenario bilateral.
A principios de 2018, el presidente ruso, Vladímir Putin, invitó a Ucrania a retirar sus buques que permanecen en la península de Crimea, que es territorio ruso. También aviones y vehículos blindados que él señaló que están "en un estado deplorable", además de resultar contaminantes.
El presidente ucraniano, Petro Poroshenko, respondió que sólo se llevaría el equipo militar ucraniano abandonado en Crimea si venía acompañado por la península.
Ahora, otra explicación de la negativa: "Si Ucrania retira su equipo militar de Crimea, los socios occidentales de Kiev se negarán a presionar a Moscú", dijo el ex comandante de la Marina de Ucrania, el vicealmirante, Serguéi Haiduk.
Según él,"Si recuperamos estos buques perderemos el litigio en las instituciones internacionales, donde presentamos una demanda. Las instituciones internacionales nos dirán: 'Pero se pusieron de acuerdo, retiraron los buques, no existe ningún problema", dijo Haiduk.
A su vez, Ucrania acusa a Crimea de ocultar una tragedia ambiental provocada por una importante liberación de contaminación industrial, que comenzó en agosto y habría rebasado la frontera de facto.
Los ucranianos apuntan a las operaciones actuales en la fábrica Titán, que produce dióxido de titanio, un polvo que es precursor de la pintura, la pasta dental y muchos otros productos.
Pero las autoridades rusas afirman que durante décadas, Titan formó un gigantesco estanque de desechos tóxicos de azufre que se acidificó. Y que el estanque es la fuente de la contaminación.
En cualquier caso, las autoridades han desalojado a alrededor de 4.000 niños de los pueblos y las aldeas a ambos lados de la frontera y han brindado tratamiento médico por padecimientos respiratorios y alergias.
El 14/09, el gobierno regional ruso en Crimea declaró el estado de emergencia en la ciudad de Armyansk, donde mucha gente ya usa barbijo a causa del olor a azufre.
Viktor Korolenko, jefe del Departamento de Salud de la región Kherson de Ucrania, que limita con Crimea, dijo que los médicos están preocupados ahora no solo por las quejas sobre dificultades para respirar, sino también por padecimientos estomacales en niños que comieron frutas y vegetales contaminados o ingirieron químicos que tenían en las manos.