Juan Manuel de Rosas fue uno de los Gobernadores más importantes de la Provincia de Buenos Aires. Personaje no sólo autoritario sino también temible, al frente de La Mazorca, su sanguinario grupo parapolicial de persecución de disidentes.
El 1er. gobierno de Rosas fue del 08/12/1829 al 17/12/1832, usando y abusando de las “facultades extraordinarias” concedidas.
Negado a continuar al mando de la provincia si no se le renovaban dichas facultades, en 1832 renunció a su cargo provocando una fuerte división interna entre federales.
Fue reemplazado por Juan Ramón Balcarce, y Rosas se dirigió al sur, a ponerse a las órdenes del general Facundo Quiroga para la Campaña al Desierto.
Rosas le había escrito a Quiroga el 31/09/1831:
"La Repubca. reportaría un inmenso bien y una riqueza positiva, si en el acto de concluir la campaña contra los tiranos, nos juntásemos en un punto céntrico y combinamos una formal expedición, que tenga pr. resultado la conclusión total de este malvado y de todos los indios que hostilizan ntras. fronteras haciendonos tanto mal."
Sabiendo Rosas que en Chile el presidente Manuel Bulnes Prieto estaba preparando una expedición en contra del cacique Chocorí, en septiembre de 1832 preparó una expedición que debía partir desde la Fortaleza Protectora Argentina y, de paso, evitar que Chile se instalara en País de las Manzanas o Neuquén y en el sur de Mendoza.
En ausencia de Rosas, su esposa, Encarnación Ezcurra, se encargó de mantener viva la flema política, e impulsó la "Revolución de los Restauradores", que despojó del poder a Balcarce y colocó a Juan José Viamonte en la Gobernación.
Encarnación fue la inspiradora de la"Sociedad Popular Restauradora", también conocida como el grupo parapolicial "la Mazorca".
El 07/03/1835 la Legislatura nombró al brigadier general Juan Manuel de Rosas para un nuevo mandato de gobernador y capitán general de la provincia de Buenos Aires, con facultades especiales, en reemplazo de Manuel Vicente Maza, hasta entonces de la confianza de Rosas.
Recordar: Maza fue quien pidió a Facundo Quiroga que mediara en el conflicto entre los gobernadores de Salta y Tucumán. A su regreso, Quiroga fue emboscado y asesinado. Este homicidio provocó la renuncia de Maza y el regreso de Rosas al poder.
En 1838, se produjo el bloqueo francés al Río de la Plata, en protesta porque a los ciudadanos franceses se los obligaba a alistarse en el ejército tal como a los nativos. Los atacantes se apoderaron de la isla Martín García. Esto llevó al cierre de las exportaciones, provocando perjuicios tanto a privados como al Fisco.
Además del malestar por la fuerte reducción de las importaciones, los productores rurales del sur de la provincia fueron perjudicados por un cambio en las condiciones de la concesión de sus campos en enfiteusis por parte del gobierno.
Los franceses se habían unido con el líder uruguayo Fructuoso Rivera, y juntos buscaban el apoyo de Juan Felipe Ibarra, gobernador de Santiago del Estero, así como de las provincias de Entre Ríos, Córdoba, Catamarca, Mendoza, y otras.
Los estancieros del sur bonaerense decidieron tomar cartas en el asunto luego de que el bloqueo francés, iniciado meses atrás, estuviera perjudicando sus economias.
Los grandes terratenientes bonaerenses eran muy federales siempre y cuando ganaran dinero, pero el bloqueo había reducido sus ingresos.
Rosas decidió el aumento del canon, impuesto sobre alguna actividad, bien o servicio, y asi agitó el enojo de sus amigos estacieros, y se gestó la conspiración.
Este movimiento de oposición y revolución se denominó"Libres del Sur", y logró dominar los pueblos más importantes de la zona en aquella época: Dolores, Chascomús y Tandil.
En la ciudad de Buenos Aires los conspiradores eran liderados por el coronel Ramón Maza, hijo de Manuel Vicente Maza, predecesor y amigo de Rosas.
En junio de 1839, el coronel Maza, fue encarcelado por sospechoso de conspirar contra Rosas, y su padre fue asesinado brutalmente por 'la Mazorca' en su casa el 27/06/1839. Luego, su hijo fue fusilado en su celda. Es importante recordarlo a quienes reivindican el 'nacionalismo popular de Rosas', en especial los justicialistas.
Ante el fracaso de la conspiración de Maza, el 29/10/1839 los Libres del Sur decidieron en Dolores seguir por su cuenta.
Había llegado la noticia de que el líder unitario, general Juan Lavalle, estaba en la isla Martín García preparándose para atacar Entre Ríos. Los Libres del Sur lo comprometieron a ayudarlos. Además, los Libres del Sur supieron que Rosas ya los había identificado así que debían luchar por su vida.
Entre voluntarios y peones, llegaron a reunir casi 2.000 hombres. Entre los principales líderes del grupo estaban Pedro Castelli, hijo del prócer Juan José Castelli; Ambrosio Crámer, un coronel francés que había sido oficial de Napoleón Bonaparte; y Manuel Leoncio Rico, oficial del ejército de Rosas.
Ellos reunieron algunos otros contingentes de la zona del Tuyú (hoy General Lavalle) y de Chascomús, hacia donde se dirigieron, para enterarse que Lavalle no llegaría porque se había lanzado sobre Entre Ríos, su destino original.
Según se sabe, Lavalle tenía pensado desembarcar en Ensenada, para sumarse a las tropas que debía reunir Ramón Maza. Pero Maza fue asesinado y Lavalle supo que Pascual Echagüe, gobernador de Entre Ríos, había invadido Uruguay, o sea que Entre Ríos estaba desguarnedia, y el 08/09/1839 ocupó Gualeguaychú. Días después venció al gobernador sustituto, Vicente Zapata.
¿Qué más falló?La organización tan apresurada y la confidencialidad fue un desastre: Rosas tenía un infiltrado en las fuerzas de Lavalle quien le informaba al Restaurador todos los planes y cambios del levantamiento.
El coronel Prudencio Rosas, hermano del gobernador, salió a enfrentar a los del Sur: el 07/11/1839 ocurrió la Batalla de Chascomús.
Rosas había llevado 1.600 soldados y unos 300 indios, y los rebeldes sumaban un total de 1.700 voluntarios.
Al coronel se unieron el regimiento de Nicolás Granada, a quien se creía en el bando de los Libres del Sur.
La derecha del ejército de Rosas estaba al mando del teniente coronel Ramón Bustos, la izquierda al mando de Manuel del Carmen García, la infantería en el centro bajo las órdenes del mayor Florencio Villanueva y la retaguardia al mando del coronel Granada. Una fuerza adicional, formada por indígenas estaba al mando del coronel Ventura Miñana (el de la estancia La María Teresa, en Azul).
Las fuerzas rebeldes, ubicadas a orillas de la laguna de Chascomús, salieron a recibir al regimiento de Granada, a quien creían su aliado, pero los hombres de éste atacaron violentamente a los rebeldes. Eran tiempos de traidores y traiciones.
Los Libres reaccionaron con desesperación y desacomodaron a los de Granada pero éste reorganizó a sus dispersos y lanzó una serie de ataques, destruyendo las reservas de sus enemigos. Con Crámer muerto, el mando pasó a Rico, quien logró intentar un nuevo ataque.
Pero uno de sus oficiales principales se pasó a las fuerzas de Granada y, en su retirada, desorganizó completamente a los Libres, quienes huyeron del campo de batalla.
Luego de 3 horas de combate, los Libres del Sur tenían 250 muertos y los rosistas apenas 7.
Pedro Castelli creyó que todavía podía lograr algo, porque un grupo había logrado tomar la ciudad de Tandil. Pero fue alcanzado y muerto, y su cabeza quedó clavada en la plaza de Dolores durante 8 años, como escarmiento. El grupo de Tandil caería sin luchar 2 días después.
La cabeza de Crámer fue expuestas en una pica en la Plaza de Chascomús.
El 16/09/1840, el gobernador Rosas dictó un decreto que confiscó las popiedades a los revolucionarios fallidos: todo tipo de bienes, tanto muebles como inmuebles, urbanos y rurales. Fueron más de 400 las personas afectadas, 659.000 animales vacunos, 226.000 lanares y 70.300 caballos.
Entre los castigados por los rosistas estaba Eustoquio Díaz Vélez, quien había abandonado su estancia de Tandil cuando fueron a buscarlo, y entonces Rosas envió a 'la Mazorca' a saquear su casa en lo que hoy día sería Avenida Belgrano 230. Además, en Tandil le confiscó 35.000 vacunos, 8.000 lanares y 3.000 caballos. Díaz Vélez recién recuperaría todo cuando cayó el dictador.
Prudencio Rosas, se instaló en Dolores y se dedicó a perseguir a quienes habían apoyado el movimiento; muchos estancieros y capataces fueron arrestados en las últimas semanas de ese año.
Rico huyó hacia el Tuyú, al frente de un grupo numeroso de hombres, y los embarcó en naves francesas. Y fueron a unirse al ejército de Lavalle en Entre Ríos. La campaña terminó con un fracaso y con la posterior muerte de Lavalle, Rico y otros jefes.
La mayor parte de los gauchos fueron puestos en libertad por orden del gobernador, quien decidió ganarse la fidelidad de la tropa anunciando que sabía que ellos habían sido engañados por sus patrones.
La derrota de los liberales (o unitarios) agotó las fuerzas de los opositores a Rosas en el sur de la provincia, que fueron sus mejores partidarios hasta el final de su gobierno. Los opositores que permanecían en la capital emigraron lo más rápido que pudieron.
Los franceses siguieron intentando ayudar a los enemigos de Rosas, pero a finales del año siguiente los abandonaron.