Whitechapel es un humilde barrio en el East End de Londres, testigo, de una serie de asesinatos que van del 03/04/1888 al 13/02/1891, adjudicados a un asesino no identificado, que se decidió apodar como "Jack, el Destripador".
La Policía Metropolitana de Londres, y Scotland Yard, imputaron sólo 5 asesinatos al mismo individuo, pero en el expediente de Whitechapel aparecen 6 más.
De los 5 confirmados, el primero de ellos fue cometido el 31/08/1888; y el último 09/11/1888.
Mary Ann Nichols, apodada 'Polly', había nacido el 26/08/1845, y su nombre de soltera era . Casada con con un impresor, tuvo 5 hijos:
> Edward John
> Percy George
> Alice Esther
> Eliza Sarah
> Henry Alfred
Se divorció en 1880.
Cerca de las 23:00 del 30/08/1888 fue vista caminando por Whitechapel Road.
A las 0:30 de la madrugada del 31/08/1888 fue vista salir del pub The Frying Pan (en español: “La sartén”).
A las 2:30, Mary no pudo alojarse en una pensión en Thrawl Street porque carecía de 4 peniques para una cama.
Según ella, buscaría un cliente, con la ayuda de un sombrero que estrenaba, afirma la crónica en Wikipedia.
De inmediato fue vista por su amiga Emily Holland en la esquina de la calle Osborn y Whitechapel Road.
A las 3:40 fue encontrada muerta por el carretero Charles Cross y su compañero Robert Paul, quienes trabajaban en el mercado de Spitalfields.
Ellos buscaron al vigilante más cercano, John Neil, quien patrullaba entre un lugar a 150 m del hospital de Londres y 100 m de Blackwall Edificios, y llegó a las 3:45.
"Polly" fue enterrada el 06/09/1888 en el Cementerio y Crematorio Ilford.
La policía entrevistó a más de 2.000 personas, investigó a 300, y detuvo a 80.
Comenzó investigando los 2 asesinatos iniciales la división criminal del Departamento de Investigación (CID) de la Policía Metropolitana de Whitechapel (H), encabezada por el inspector Edmund Reid.
Luego, la oficina central de Scotland Yard envió a los inspectores Frederick George Abberline, Henry Moore y Walter Andrews.
Más tarde intervino también la policía de la City de Londres, por medio del detective James McWilliam.
Hubo un problema desde el inicio: el encargado recién electo del CID, Robert Anderson, estuvo de licencia en Suiza entre el 07/09/1888 y 06/10/1888.
Charles Warren, comisionado de la Policía Metropolitana, nombró a Donald Swanson para coordinar las investigaciones de Scotland Yard.
Insatisfechos con los resultados, un grupo de ciudadanos del East End de Londres comenzó a patrullar las calles por su cuenta, autodenominados "Comité de Vigilancia de Whitechapel".
Y contrataron a detectives privados para entrevistar a presuntos testigos.
Es decir que el Estado perdió el monopolio de la investigación, y todo fue muy desprolijo, lo que ayudó a alimentar el mito.
La reina Victoria opinó que el culpable debía ser un carnicero o ganadero proveniente de alguna de las embarcaciones de ganado que operaban entre Londres y Europa Continental, tomando en cuenta la cercanía entre Whitechapel y los muelles de Londres.
La policía consideró inicialmente como sospechosos a los carniceros, cirujanos y médicos.
De acuerdo a un reporte del inspector Swanson, se visitaron 76 carnicerías y mataderos e investigaron a sus empleados durante 6 meses.
A finales de octubre, Anderson le pidió al médico forense Thomas Bond que evaluara las heridas de las víctimas y ofreciera su punto de vista.
Bond se basó en la autopsia del cadáver con mayores mutilaciones y los registros de autopsia del resto de las víctimas:
"No cabe duda que los 5 asesinatos fueron cometidos por la misma mano. En las primeras 4 [víctimas], las gargantas parecen haber sido cortadas de izquierda a derecha y en la última, debido a la extensa mutilación, es imposible decir en qué dirección se hizo el corte fatal, aunque se encontró sangre arterial en la pared, salpicada cerca de donde la cabeza de la mujer debió haber estado.
Las circunstancias en torno a los asesinatos me llevan a deducir que las mujeres estaban recostadas al momento de ser asesinadas, y en todos los casos [el homicida] cortó primero la garganta. (...)".
Bond rechazó la idea de que el asesino contara con conocimientos anatómicos, o "el entendimiento técnico de un carnicero o matarife".
Según él, era un hombre solitario, sujeto a"ataques periódicos de manía homicida o erótica" e hipersexual, según las mutilaciones.
También señaló que "el impulso homicida podría haber surgido de alguna condición mental de venganza o melancolía, o una manía religiosa, aunque no creo que ninguna de estas hipótesis sea [procedente]".
Algunos psicólogos supusieron que la penetración de las víctimas con un cuchillo y "la exhibición de los cadáveres en posiciones sexualmente degradantes con las heridas expuestas" indicaban que el responsable obtenía placer sexual con los ataques. Otros no consideraron probado esto.
Wikipedia: "Aunque existen análisis de ADN realizados a partir de las cartas atribuidas al homicida, lo cierto es que sus resultados no fueron concluyentes y ya están demasiado adulterados como para proporcionar algún dato útil."
Unos dijeron que el asesino era un vecino de Whitechapel, otros que era un aristócrata que había llegado a saciar sus deseos.
Jack el Destripador, primer asesino en serie
Un memorándum de Meville Macnaghten, de 1894, identificó a 3 sospechosos pero la evidencia fue escasa.
En total hubo más de 100 sospechosos. Y la prensa incorporó a otros al listado.
La policía recibió al menos 3 cartas supuestamente firmadas por el asesino, en las que se mofaba de las investigaciones y amenazaba con seguir asesinando a prostitutas.
Una de las misivas estaba firmada por "Jack el Destripador" y por ese motivo comenzó a llamarse así al asesino.
George Lusk, presidente del comité de vigilancia de Whitechapel, recibió una caja de cartón con un riñón conservado en alcohol, y un texto:
"Desde el infierno. Mr. Lusk: Señor. Le envío la mitad del riñón que saqué de una mujer. La otra mitad la freí y me la comí, estaba muy buena. Puedo mandarle el cuchillo ensangrentado conque lo saqué sólo si espera un poco. Firmado: Atrápame si puedes. Mr. Lusk."
La Agencia Estatal de Noticias recibió un texto:
“Querido Jefe, desde hace días oigo que la policía me ha atrapado, pero en realidad todavía no me han pescado. No soporto a cierto tipo de mujeres y no dejaré de destriparlas hasta que haya terminado con ellas. El último es un magnífico trabajo, a la dama en cuestión no le dio tiempo a chillar. Me gusta mi trabajo y estoy ansioso de empezar de nuevo, pronto tendrá noticias mías y de mi gracioso jueguecito. Firmado: Jack el Destripador, desde el Infierno".
Sigue siendo un enigma.